¿Se puede vencer la timidez con el spray de la confianza?

Vivir para ver. El spray de la confianza, un spray que promete ayudarte a vencer la timidez y hacer que los demás confien más en tí,  está de moda.

Leyendo la prensa este fin de semana me encontré con un divertido artículo de la periodista Rosa Belmonte, en su columna Probando Voy, que titulaba “Pensamiento mágico en spray” en el que decía..  “si Tamara Falcó lleva en el bolso un vaporizador de agua bendita, yo llevo Energy spray for an aura of confidence, es decir, un spray de energía para lograr un aura de confianza”. Contaba después que hay lista de espera de dos semanas para comprarlo online y aporta info sobre el spray en cuestión “este spray está formulado para revitalizar el campo bioenergético del cuerpo. La fórmula contiene azahar y geranio, que levantan el ánimo, enebro, que protege y energiza ese campo energético, y el lemongrass que limpia la negatividad. También está realizado con una combinación de sales del Himalaya y agua pura de rosa, que tiene propiedades curativas” Acaba el artículo citando a Mark Twain,  según quien,  para triunfar en la vida se necesitan dos cosas:  ignorancia y confianza 🙂

Personalmente, me basta con un par de taconazos, preferiblemente con plataforma, para sentirme poderosa cual Diosa Celta (es que soy viguesa) e ir pisando fuerte por la vida. Sin embargo, me interesan estos temas, siempre en la vanguardia y búsqueda de productos únicos.

Oxitocina ¿la molécula milagrosa?

Lo curioso del caso es que un spray de oxitocina podría tener dichos efectos. Hace unos años dí con un libro de la psicóloga S. Taylor ( Lazos vitales, Taurus ediciones, 2002) en el que afirma que el comportamiento altruista es tan importante para la superviviencia que la naturaleza lo ha preservado grabándolo en varios circuitos neurológicos distintos. La oxitocina, la vasopresina, los péptidos opiáceos endógenos y las hormonas del crecimiento conforman lo que ella denomina el circuito neurológico afiliativo  “un intrincado sistema de conexiones simultaneas e interactivas que influyen en muchos aspectos del comportamiento social”.

Las recientes investigaciones con escaneres cerebrales en seres humanos relizadas por James Rilling ( ” a neural basis for social cooperation”, Neuron, 25, pags 3956-405)  y sus colegas muestran que la cooperación mutua está relacionada con la activación de los centros de recompensa del cerebro, el sistema dopamínico. El cerebro libera dopamina cuando colaboramos, produciéndonos una instantanea sensación de bienestar, que refuerza el comportamiento.
El equipo de investigación liderado por Michael Konsfield y sus colegas de la Universidad de Zurich, ( “Oxytocin increases trust in humans” Nature 435, 2005, pags 691-700) propuso la hipótesis de que la oxitocina podría jugar un papel importante en el comportamiento del acercamiento entre humanos, sobre todo en nuestra voluntad de confiar. El equipo de Konfield creo un “spray de la confianza“: descubrieron que, al aplicar al grupo de voluntarios un spray nasal con oxitocina, crecia también la confianza.

A la vez, un grupo de investigadores de la Universidad de Concordia de Montreal (Canadá) desarrolló un aerosol de oxitocina, hormona que se produce en grandes cantidades durante el embarazo, que podría servir para fomentar la extroversión y combatir la timidez. Según reconocen los autores de este hallazgo en la revista ‘Psychophamarcology’, «la oxitocina facilita la conducta social y modifica la forma en la que procesamos las señales sociales externas, su codificación y su interpretación» y, de hecho, en el ámbito médico suele conocerse como la hormona del apego o del abrazo. En dicho estudio, se utilizaron dos tipos de spray que fueron administrados a cien hombres y mujeres de entre 18 y 35 años, uno con oxitocina y otro con una sustancia que funcionaba como placebo. «Los participantes que se administraron oxitocina intranasal tuvieron calificaciones más altas de extroversión, amabilidad y apertura a nuevas experiencias que quienes utilizaron el placebo», ha explicado Christopher Cardoso, uno de los autores del estudio, en declaraciones a la BBC.

Esto se debe, según Mark Ellenbogen, director de la investigación, a que la oxitocina “facilita el comportamiento social, cambiando la forma en la que uno se percibe a sí mismo“. Todavía no saben “si habrá efectos negativos asociados a su uso continuado“, aclaró Ellenbogen.

Los efectos positivos de la oxitocina también se vienen analizando en el tratamiento de fobias sociales o en casos de autismo. En ese sentido, el psiquiatra Eric Hollander del Colegio de Medicina de Nueva York, ha encontrado que la hormona mejora la capacidad de los autistas para reconocer las emociones.

En la actualidad, hay al menos una empresa en USA  que lo comercializa bajo el nombre Liquid Trust

Ahí queda.

Carmen Torres Vila
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• 11 Dic 2014